Las etapas emocionales que pasaremos ante la pandemia

Nos toca en estos momentos a la condición humana enfrentar la situación mas drástica de la historia del siglo XXI. La cual nos afecta desde comienzo de este año 2020.

La pandemia nos ha superado, sin advertirla la hemos visto llegar y no la pudimos prevenir.   Nos sentimos vulnerables y desolados ante tanta información de toda índole que nos llega, como ser: estadísticas, situación de los países, mensajes de cómo cuidarse, quédate en casa, limpiarnos, etc.  Y buscamos no alarmarnos ante tanta cosa que circula por los medios masivos de comunicación.

Desde la psicología podría contribuir con un aporte que nos servirá para entender como nos vamos sintiendo emocionalmente y las etapas que vamos a atravesar. Para asi reconocerlas y enfrentarlas de buena manera, con una actitud positiva a pesar de las circunstancias.

Desde que nacemos pasamos por situaciones traumáticas que nos llevan a tener que separarnos de algo para poder crecer.  Y asi se inicia en nuestra mente la capacidad de elaborar positivamente las perdidas e integrar nuevas conquistas.  En este caso la perdida será tomada como la pandemia que estamos viviendo. 

No podemos elegirlas pero si qué actitud tomar ante ellas. Procesarlas no será tarea fácil pero si lo tomamos como un desafío, una toma de conciencia clara de un nuevo crecimiento que implicara una nueva manera de vivir y de relacionarnos (cuidándonos entre todos) y obtener una experiencia de crecimiento y solidaridad.

ETAPAS

  Esto que atravesamos que no sabemos que va a pasar en un futuro, lo equiparamos a la situación del duelo, es decir  pasaremos por las diversas etapas emocionales que suceden en el DUELO, cuando repentinamente sufrimos la muerte de un ser querido, no hay vuelta atrás ya nada será como entonces.   La pérdida de un trabajo, de manera repentina, una separación y estar  solos.  Algo que no lo previmos y rompe nuestros esquemas.

1° Etapa: La Negación:

Nos dieron la noticia de que hay un virus que se esta propagando y que en breve podría estar afectando también a nuestro país. 

Que hacemos? Lo negamos: “pero aca no va a llegar… tenemos todo previsto…” la negación, nos lleva a racionalizar creer que no nos va a ocurrir.  Nos tranquilizamos diciendo que aca no va a llegar porque estamos protegidos, etc.     Y cuando ya sabemos que lo tenemos aca y  es inminente, seguimos negando que nosotros lo estamos agarrando a tiempo y ya estábamos prevenidos, que no nos tomo por sorpresa como en Italia, España etc.  La negación a veces suele llevar a la Ira y a la rabia. Podemos enojarnos con el sistema sanitario, político, etc.  Pensemos que  inevitablemente pasaremos por esto, nos guste o no, pero pasara.  No podemos quedarnos cristalizados  en esta etapa porque perderemos la capacidad de ser cautos a la hora de pensar y actuar y ver la manera de sobrellevarlo.

2° Etapa: El Miedo:

Nos quedamos paralizados, nos invade una sensación de que caeremos en un caos o de que nadie podrá protegernos.  Con una incertidumbre de ¿Qué nos va a pasar?.  Pero hay dos tipos de miedo: uno sano, que nos ayuda a protegernos y no salir de casa por temor al contagio.  Y otro el tóxico (nos dice la autora Pilar Jericó, del diario El Pais, 17/03) que nos lleva a una histeria colectiva, a las compras compulsivas o en el peor de los casos a no dormir por las noches, pensando todo el tiempo en el tema.   Otra fase que debemos transitar y si es rápido mejor, ya que no podemos dejarnos vencer por la incertidumbre que este causa, ya que nos impide seguir y nos lleva a enceguecernos ante la posibilidad de afrontar la crisis con una actitud positiva. Nos anula a la reflexión y al cambio.

3° Etapa: estoy triste soy vulnerable:

Lo que la autora le llama la travesía por el desierto: en este momento ya no hay mas rabia ni desazón, aparece la tristeza por los hechos que suceden y nos vamos enterando, las muertes y cantidad de infectados, algunos cercanos a nosotros.  Es momento de aceptación de la realidad, el abatimiento pasó a ser reconciliación con la verdad.   Y en esta etapa la travesía por el desierto hay que afrontarla con las acciones que se están tomando de estar en aislamiento algunos, otros atendiendo pacientes infectados, otros yendo a trabajar con guardias mínimas, etc.  Se toman medidas drásticas (cierre de fronteras, suspensión de espectáculos y actividades deportiva, cierre de hoteles, suspensión de clases, parálisis  de la actividad productiva etc) pero que tienen como principal objetivo cuidar a la sociedad y cuidarnos entre todos.

4° Etapa: aceptación de la realidad y nuevos hábitos:

Cuarentena:

Una vez aceptada la realidad y las medidas de prevención para todos los ciudadanos, adoptamos los nuevos hábitos tratando de encontrar el lado positivo, tomarnos las cosas con humor.  Que nos hará que estemos abiertos al crecimiento, al aprendizaje,  como dijimos más arriba abrirnos a un nuevo modo de ser, nuevo modo de vivir.  Pensar que si hemos resistido quedarnos en casa una semana y estamos bien, nada ha colapsado, podremos entonces permanecer una semana mas, y luego otra mas y lo que haga falta para ayudarnos entre todos a superar la pandemia.  Y a la vez preguntarnos que aprendizaje nos trae esta crisis.  Seria como un llamado a la reflexión.

Como nos dice un autor: “El crecimiento de una persona esta ligado a la capacidad de manejar de manera constructiva las adversidades que se le presentan”(Arnaldo Pangrazzi,  El Duelo, 2013) . 

Podemos recapacitar en cuarentena, vivimos un proceso de toma de conciencia, en este tiempo, veremos qué cosas son las que volvamos a valorar y que antes no valorábamos.  Tal vez, el placer del encuentro con el otro en persona, poder darnos un abrazo, brindarle tiempo a las cosas que realmente son importantes, estar mas tiempo con los hijos un tiempo de calidad, donde podamos escucharlos, entenderlos y acompañarlos en su crecimiento, sin dejar de apoyarlos y advertirles cuando viene el peligro.

5°  Etapa: soy mas fuerte! ¡Estoy preparado!

Cuando todo finalice, veremos que esta crisis será una historia mas en nuestras vidas, que nos hizo reflexionar sobre cúanto podemos ser solidarios entre nosotros, con nuestros padres y compartir mas tiempo con nuestros hijos.

Si bien todavía no hemos llegado a esta ultima etapa, tal vez algunos ni siquiera a la segunda, porque cada persona es diferente y depende de cada uno como ha desarrollado la capacidad de manejarse  ante adversidades. Vemos que es un proceso y que podremos estar a veces en el desierto y regresar al enojo y la rabia por momentos, porque puede ser cambiante como los hechos que vamos conociendo. Y claro! que nos afectara a cada uno de manera diferente y también tendremos reacciones diferentes.

Que esta información nos ayude a que estemos alertas a nuestro estado emocional y dispuestos  para sobrellevar esta pandemia de la mejor manera.